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Hiperplasia prostática benigna y trabajo físico

Pregunta

Con frecuencia, después del trabajo físico, me siento peor, incluyendo la zona de la próstata. ¿Qué nivel de carga es adecuado con el diagnóstico de «hiperplasia prostática benigna» al trabajar, por ejemplo, en el huerto? Pregunto esto porque vivo en el campo, tengo mi propia casa, un terreno y un pequeño establecimiento agrícola. Necesito trabajar. ¿Cómo debo cuidar la próstata durante la actividad física? No siempre entiendo cuándo he trabajado correctamente y cuándo me he hecho daño. ¿Podría orientarme detalladamente sobre cómo actuar en cada situación?

Respuesta

Acostúmbrese al autoanálisis

Primero, quiero ofrecerle un consejo clave. Si ha iniciado un proceso de mejora de la salud y los resultados no son los esperados, deténgase un momento y analice cada acción mientras se encuentra en reposo. En este estado, recordar los esfuerzos realizados y reflexionar sobre ellos suele ser mucho más eficaz que actuar de manera automática. No se preocupe por el tiempo que dedique a pensar; este tiempo es valioso para comprender su propio cuerpo. Aprenda a «escuchar y oír» su cuerpo y a sacar conclusiones correctas. Una pausa analítica profunda genera mucho más beneficio que los movimientos hechos sin atención ni conciencia.

Hoy en día, muchas personas ofrecen consejos sobre el tratamiento de la prostatitis crónica y la hiperplasia prostática benigna. La rapidez con la que circula la información hace que estas recomendaciones estén disponibles casi de inmediato para cualquier interesado. Esto es positivo si se aplica adecuadamente, pero es fundamental adaptar toda la información a uno mismo y solo después de analizarla y procesarla con atención plena.

En la mayoría de los casos, los especialistas aseguran que la hiperplasia prostática benigna puede combatirse o ralentizarse de manera natural mediante la actividad física, considerada una de sus formas de manejo, pero casi nadie explica en detalle cómo realizarla correctamente. Esta falta de precisión ha generado la idea equivocada de que cualquier tipo de movimiento es beneficioso para la hiperplasia prostática benigna. En realidad, no se trata de moverse por moverse, sino de realizar la actividad de manera consciente, equilibrada y controlada.

Vamos a analizar algunos ejemplos concretos de trabajo en el huerto y el jardín, ya que esta pregunta surge con frecuencia. Trataré de explicarlo de manera clara y sencilla, de modo que pueda comprenderlo correctamente y obtener beneficios reales al aplicarlo.

El error principal: trabajo monótono

Supongamos que está desmalezando o cavando a mano en su terreno. En este caso, su herramienta de trabajo será la azada o el azadón, dependiendo de la región. Al comenzar a trabajar la tierra, adopta una postura ligeramente inclinada y debe mantenerla hasta terminar la tarea o hasta tomar una pausa. Durante esta actividad, los músculos de los brazos se contraen de manera más o menos activa, mientras que los músculos de las piernas apenas participan. Y eso es todo.

La zona de la pelvis y la columna vertebral permanece casi inmóvil, y ciertos grupos musculares circundantes, incluidos los cercanos a la próstata, permanecen tensos sin ningún tipo de relajación. Esto significa que estos músculos sufren todos los efectos negativos de este tipo de carga, incluyendo incluso una ligera falta de oxígeno, y no se obtiene ningún beneficio. Si necesita trabajar un terreno grande y lo hace de una sola vez, pueden surgir problemas no solo relacionados con la próstata. Su cuerpo estará un poco más activo al trabajar con rastrillos, y durante la recolección, la rigidez dependerá de la actividad específica.

Siempre que sea posible, realice estas actividades en sesiones cortas de diez a quince minutos. En estos intervalos es más fácil concentrarse en la calidad del movimiento, incluso si realiza movimientos adicionales, y en la respiración. Durante las pausas, estire las partes del cuerpo que tienden a tensarse. En su caso, los giros, las rotaciones del torso y las inclinaciones serán especialmente adecuados.

Si necesita realizar varios tipos de trabajo, alterne constantemente entre ellos en intervalos similares y combínelos con pausas regulares. Caminar más de lo habitual puede resultar muy beneficioso; quizás no sea lo más racional, pero sin duda contribuye a la salud. Por ejemplo, puede comenzar a trabajar la tierra en distintas partes opuestas del terreno. Este tipo de fisioterapia aplicada a la hiperplasia prostática benigna será exclusivamente beneficiosa. Al leer y comprender otras publicaciones de este sitio, podrá aprender a provocar de forma consciente mayor esfuerzo y relajación muscular. Para los usuarios que visitan el sitio por primera vez desde esta página, recomiendo consultar la Lista de artículos y continuar estudiando los contenidos en detalle.

Sobre el sobrecalentamiento y la hipotermia

Además de lo anterior, recuerde que en los días calurosos debe protegerse del sobrecalentamiento y no exponer ninguna parte del cuerpo directamente a los rayos solares. En las estaciones frías o templadas, evite que su cuerpo se enfríe demasiado. Estoy convencido de que en su terreno personal no tendrá contacto con fertilizantes minerales; ni siquiera debería considerar utilizarlos para sus necesidades personales. Si percibe la necesidad, no dude en mejorar o adaptar sus herramientas de jardinería y huerto, afilándolas, alargándolas o acortándolas, ensanchándolas o estrechándolas según sea necesario. En general, aplique el sentido común y la racionalización en todas sus actividades. Y, por supuesto, evite cualquier accidente o lesión.

De lo anterior se desprende una conclusión importante: el trabajo parcialmente activo y mayormente monótono o rutinario no aporta ningún beneficio si padece hiperplasia prostática benigna; por el contrario, puede causar complicaciones e incluso la aparición de síntomas dolorosos, porque las contracciones musculares son muy limitadas. El trabajo físico prolongado no equivale a ejercicio terapéutico. Durante estas tareas, algunos músculos pueden sufrir espasmos, y aplicar una respiración correcta es casi imposible. Si además consideramos que su mente está enfocada únicamente en terminar la actividad y no en el proceso de mejora de la salud, no obtendrá ningún beneficio.

Sobre el daño secundario

Por último, un detalle importante. Al responder a esta cuestión, asumo que usted no se está causando otro tipo de daño. Por ejemplo, recibí un correo electrónico con el siguiente contenido aproximado (no conservé el original): «Estimado autor del sitio, me dirijo a usted con un gran deseo de vencer la hiperplasia prostática benigna, que me ha causado muchas molestias últimamente. He leído su método y no solo apareció la esperanza, sino la fe. Soy una persona muy enérgica, activa, no demasiado mayor, y me gusta trabajar de manera productiva. Mi pasatiempo principal es trabajar en mi terreno de recreo. No fumo, es decir, casi no tengo hábitos nocivos. Lo único que me permito es beber cada día antes de la cena, de una sola vez, no más ni menos, 100 gramos de vodka casero, pero lo hago de manera constante desde hace varios años. Me interesa su octavo tema y cuanto antes, ya que se acerca la temporada en el campo y quiero comenzarla sano, sin hiperplasia prostática benigna».

Mi respuesta al remitente fue clara y única: cualquier intento de mejorar la salud con un diagnóstico de hiperplasia prostática benigna debe realizarse únicamente después de abandonar completamente los hábitos dañinos, especialmente el consumo de alcohol. Con la hiperplasia prostática benigna, el vino y otras bebidas alcohólicas están categóricamente contraindicados. La correspondencia se interrumpió de inmediato, ya que renunciar a un hábito que proporciona placer no es fácil. No envié materiales adicionales ni seguí sus búsquedas posteriores.

Considero que mi respuesta a esta pregunta es completamente detallada y útil para cualquier visitante interesado en este recurso.

Con respeto, Gennadiy Plotyan, blog sobre sintomatología, matices del diagnóstico y tratamiento de la hiperplasia prostática benigna.

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